Unos 150 vecinos desalojados de Sejas de Aliste (Zamora) han pasado la noche en el pabellón polideportivo y hoteles de la localidad de Alcañices, desde donde uno de ellos, Mercedes de Casas, ha asegurado a EFE que “la gente está tranquila porque el incendio no ha tocado nada del pueblo” aunque hoy “huele mucho a humo”.
De Casas ha explicado que las personas de mayor edad han sido trasladadas a un albergue y establecimientos hoteleros de Alcañices, mientras que más de un centenar de vecinos han pasado la noche en el pabellón polideportivo atendidos por Cruz Roja.
Esta vecina de Sejas de Aliste ha indicado que los momentos de mayor tensión se vivieron el sábado por la tarde, cuando fueron evacuados por la Guardia Civil, porque algunos vecinos con viviendas o naves ganaderas próximas al incendio querían quedarse en el pueblo para ayudar y defender del fuego sus propiedades y no les dejaron.
En un autobús y en vehículos particulares, los vecinos de Sejas de Aliste se dirigieron a Rábano y de ahí a Alcañices, donde han pasado la noche, les han dado de cenar y de desayunar y el personal de Cruz Roja ha estado pendiente de ellos.
“A cada momento te preguntan que si te necesitas algo”, ha explicado esta mujer, que aunque habitualmente reside en Marbella es natural de Sejas de Aliste, donde veranea y de donde fue evacuada junto a su marido y un hijo adulto.
Sobre el hombre de 65 años fallecido a causa de un infarto cuando era evacuado por el incendio, ha lamentado la muerte de ese vecino de Sejas de Aliste que, tras haber vivido un tiempo en Francia, había regresado a la localidad.
Ha explicado que sufrió el infarto cuando viajaba en el coche con su hermano y se sintió indispuesto a la altura de la localidad de Tola.
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