Profepa clausura predios en Michoacán por tala ilegal y cambio de uso de suelo para aguacates

Debido a la tala ilegal de árboles de encino-pino para establecer huertas de aguacate, sin autorización previa del uso de cambio de suelo en terrenos forestales, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró temporalmente un predio con una superficie de cinco hectáreas dentro del paraje “El Rincón”, ejido y municipio de Contepec, en Michoacán, dentro de la zona de influencia del Área Natural Protegida Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca.

El 22 de octubre, la dependencia realizó una inspección en materia forestal en este predio en respuesta a una denuncia ambiental por tala y cambio de suelo en la región. Durante el recorrido la Profepa constató la afectación al ecosistema de bosque de encino-pino por la tala ilícita de árboles y la siembra de cultivos agrícolas.

En una de las áreas inspeccionadas, con una superficie de 2.2 hectáreas, se observaron 12 tocones de árboles de encino (parte del tronco de un árbol que queda unida a la raíz después de haber sido cortado o caído) que en su estado base representaban un volumen total de 3.616 m3 de madera. Además, se observaron 500 plantas de aguacate de entre 0.80 y 1.80 metros de altura así como 12 plantas de limón.

Indicó que esta tala fue de forma ilegal, puesto que los tocones no presentaban marca o señalamiento de responsable técnico forestal y la ausencia de autorización para el aprovechamiento forestal maderable.

En otra superficie de 2.82 hectáreas se contabilizaron aproximadamente 470 plantas de aguacate, ubicadas en la zona alta del bosque.

Al no contar con las autorizaciones correspondientes para el aprovechamiento forestal maderable ni para el cambio de uso de suelo, y ante el riesgo inminente de desequilibrio ecológico, se impuso como medida de seguridad, la clausura total temporal de ambas superficies afectadas.

Recordó que la Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca fue decretada como Área Natural Protegida de carácter federal el 10 de noviembre de 2000, con una superficie de 56 mil 259 hectáreas, y en 2008 fue reconocida por la Organización de las

Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) como Patrimonio Natural de la Humanidad. Abarca municipios del Estado de México y de Michoacán.

Su valor ecológico radica en sus ecosistemas de bosques de oyamel, pino, encino y cedro que albergan en sus santuarios el fenómeno migratorio de la mariposa Monarca, además de ser el hábitat de 184 especies de vertebrados. Es una de las 13 Zonas Críticas Forestales de atención prioritaria.

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